jueves, 22 de marzo de 2007

Poniendo a la Razon al Mando

Caminando por la hojarasca mí voluntad y mi cerebro borran, lentamente las líneas tan perfectas de tus ojos, de tus manos, como cuando los monjes oran para borrar los pecados que algún día se hicieron unos con otros. 

Desapareciendo la infinita luz de tu mirada, esa que como un látigo de rayo desatando su vuelo mi vida termino, esa que dejo mi voluntad tirada luego de esclavizarme a tus ojos, esa que en mi corazón germino, esa en este momento morirá.


Destruyendo cada laberinto de abismos inundados de tu delicioso aroma, ese que al olerlo en algún lugar mi corazón tiritaba, y mi razón caía lentamente envenenándome la mente, y ahora mi razón la cordura toma!.


Desintegrando lentamente en la caminata de tu olvido, borro los pergaminos que registran la suavidad de tu piel, que mi inocente piel rozo y toco tanto, esa crema blanca tan suave como la seda y con un sabor que solo se compara con la miel. 


Esfumando tantos recuerdos tan tristes como tiernos, que estuvieron presentes en cada sueño para revivir cada momento en mi inconciencia cada noche una y otra vez.

1 comentario:

  1. Otra maravillosa obra de arte, por algo te tardás en llamar a tu musa, cuando regresás lo hacés por algo.

    Excelente, simplemente excelente.

    Saludos!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    P.D.:Me gusta que te guste que a todos nos guste, tus inspiraciones, jejeje.

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